Probablemente, lo que más mola de tener niños –además que se
siempre te vean guapa incluso recién levantada, con el rimel corrido cual
bailarina de Las Vegas yonqui y con la bata de anciano del pater puesta- es que
puedes disfrutar en primera fila de su curiosa visión del mundo, sin adulterar
por el peso de la realidad. Vamos, que te puedes quedar con ellos con cualquier
historia por surrealista que sea.
Yo como soy malamadre aprovecho esto a mi favor y a la pelirroja lo mismo
un día le hago creer que existen las brujas y el hombre del saco para
mantenerla a raya, y al día siguiente la veo con cara de horror y le confieso
que es mentira, que una también tiene su corazoncito… y al otro día, vuelta a
empezar… y da igual cuantas veces lo haga que siempre encuentro terreno virgen.
Pero laz brujaz ¿qué ez lo que comen, mamá? / Pues de todo,
pero básicamente ojos de serpiente putrefactos y colas de ratas hipertensas –que
a mí también me va la marcha- / Qué azcooo ¿y ezo dónde lo compran? / Ah, pues
en la tienda de las brujas, que allí hay de muchos tipos y sabores y muy buenas
ofertas / ¿Y me puedez llevar un día, anda mami polfi? / Qué disparate pero si
eso da mucho miedo… / Anda mamí, polfi, puez que venga papi con nosotras / No
porque te va a dar miedo / Que de verdad que no… que ademáz, yo me llevo el
amuleto –que es un pedrusco contra el reuma de los chinos- / Vale pues cuando
te comas la comida de mayor, te llevo / Biennn, pero la tortilla no, ¿vale? Que me
da musho azco / Vale / ¿Y allí ze va en autobúz? porque yo me mareo musho…
Mamá, ¿las hadaz ezizten? / Claro / Yo es que un día vi una
pero no sé si era un hada o una mozca grande, porque eztaba ozcuro pero no me
picó ni nada y yo creo que era una hada porque laz hadaz no pican ¿a que no? / No,
a no ser que tenga la rabia. Yo creo que lo que viste podría ser un hada-mosca,
que son hadas que se convierten en moscas cuando viene la gente para que no las
vean. / ¿Y zon mzscas normalez o llevan falda? / Hombre, llevan falda. / Puez
yo creo que vi una en mi cole un día. / Seguro...
Yo ez que quiero tener poderez... / Y los tienes / Qué vaaa,
mira – y hace como que lanza cosas con la mano en plan hechicera de teleserie
barata- no zale nada / Pero a lo mejor tú tienes otro poder secreto como hacer
que se cumplan los deseos / Anda puez yo creo que zí porque yo había dezeado ir
al cine y hemoz ido… uauuu / ¿Ves? / Mira, ahora voy a dezear otra coza –y se
coge la cabeza como si le estuviera dando un jaquecón mortal o un derrame, y
vuelve a hacer el gesto de lanzamiento hechicero- jooo, había pedido tener
poderez y no me zale / Pero porque son poderes a largo plazo / ¿Ezo ez que zon
inviblez? / Claro / Qué guay
Y ayer mismo, estaba en el cuarto con el pater poniéndose
el pijama y la escuché decirle: He penzado que para mi cumpleañoz no quiero la bici,
mejor quiero una mazcota, pero una chuli. Quiero un unicornio que zea roza y
morado y lo voy a llamar ‘María Magdalena’ porque es el nombre favorito de mami
–ahí lo llevas, primera noticia- porque había penzado llamarlo Zandra pero creo
que no le pega…
Y yo que soy de visualizar mucho las cosas ya he visto al
unicornio bicolor llamado María Magdalena trotando por la casa,
arrasando con el mobiliario y con Cigoto enganchado a las crines y la visión me
ha llegado. Vamos, que ya estoy mirando por internet a ver si localizo uno a
buen precio.
Si es que la juntera es lo que tiene. Que todo se pega.
Pues no me había creído que iba a descansar en mis vacaciones.